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Jaume Plensa, artista residente del Liceu en la temporada 22/23, se instala en el Gran Teatre del Liceu con dos destacados proyectos que ponen el valor su universo creativo y su lenguaje expresivo.

El Liceu, en su rumbo a la colaboración con artistas plásticos, da un paso más para consolidarse como una institución cultural que tiene la ópera como eje principal vertebrador pero que también incluye todas las artes.

Constelaciones, puertas que invitan a entrar

 En el marco del 175º aniversario, el Liceu encarga a Plensa una obra de arte que contempla unas puertas a las tres arcadas de la entrada principal del Gran Teatre: un nuevo elemento arquitectónico de gran valor artístico que a la vez conformará un elemento patrimonial en la Rambla. Constelaciones es una muestra de cómo el arte puede aportar una funcionalidad de protección al espacio patrimonial, y a la vez generando pensamiento en el espacio.

La estructura de la obra son tres cledas caladas situadas en las tres arcadas de la entrada principal del Teatre en La Rambla, construidas con tres paneles de plancha de seis milímetros de grosor que incluyen letras de diferentes alfabetos de acero inoxidable. El juego de alfabetos es uno de los rasgos diferenciales en la obra del autor: “La diferencia entre alfabetos es de una belleza única y es una metáfora de la diversidad. Un alfabeto expresa bien la forma de ser de cada cultura. La resume y forma el retrato más preciso” afirmaba el artista en una entrevista con la periodista Leonie Schilling. En este sentido, la obra quiere ser un homenaje a la diversidad y una invitación a todos a entrar. En palabras del artista, “un canto a la esperanza de la globalidad positiva. No es la uniformización de los abecedarios, sino la belleza de ver culturas muy diversas mezcladas, pero manteniendo su identidad”. El director artístico del Liceu, Víctor Garcia de Gomar, añade que esta muestra del artista “se erige como una escritura hecha escultura, una gramática de las emociones. Una vez que se traspasa las puertas, dentro del Teatre, el lenguaje que encuentra es el de la música y el arte: un alfabeto universal”.

En cuanto al material seleccionado (acero), éste conecta con una tradición mediterránea de utilizar materiales habituales y cotidianos como la tierra, vidrios, el hierro, madera, barro, cerámica, etc. Una transformación de materiales “humildes” que mediante la intervención de Jaume Plensa adquieren un nuevo rango y significado artístico. Estableciendo un diálogo con la obra de Miró (Mosaic del Pla de l’Os), situada a pocos metros del Teatre de la Rambla, se compone así una unión simbólica y física de dos artistas catalanes reconocidos en todo el mundo.

Sobre los detalles técnicos, estas puertas pesan alrededor de 500 kilogramos cada una de ellas y migran sobre un eje que se empotra en el arranque del arco justo por encima del capitel de las pilastras. La convexidad de las puertas no supera el plano exterior de las pilastras y hace que el paso mínimo debajo de la cleda abierta sea de unos 3 m de altura.

La obra se integra sin afectar a ningún otro elemento pretérito incorporado con anterioridad a la fachada de Oriol Mestres de 1874 y recuperada en 2019. En los últimos años el Teatre del Liceu ha completado las restauraciones de los elementos originales que durante la reconstrucción de 1999 no se pudieron llevar a cabo. En verano de 2017 se restauró el vestíbulo, la escalinata y el Saló dels Miralls. En verano de 2019 se recuperó la fachada histórica de Oriol Mestres de 1874, se restauró las cuatro vidrieras wagnerianas de Oleguer Junyent de 1904 y en verano de 2021 se llevó a cabo la restauración de la marquesina de entrada. Como colofón de este proceso de rehabilitación que el Teatre ha realizado en los últimos años, el artista residente Jaume Plensa ejecutará la instalación de Constelacions, que añade un nuevo elemento patrimonial. La propuesta tiene la decidida colaboración de la Fundación ACS y también cuentan con el apoyo del Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña dentro del programa PO FEDER 2014-2020 de operaciones en el ámbito de equipamientos de artes escénicas y musicales.

Macbeth, un universo poético

Artista plástico, escultor y grabador, Jaume Plensa ha experimentado con el dibujo, los escenarios de ópera junto a La Fura dels Baus, las videoproyecciones y las instalaciones acústicas, entre otros. Para Jaume Plensa, el Macbeth de Verdi-Shakespeare ha sido un sueño de juventud. El Liceu invita ahora a este artista catalán universal a ocupar el Macbeth de Verdi, una original ceremonia estética donde pondrá en movimiento su creación escultórica y plástica, dirigida musicalmente por Josep Pons.

Esta nueva propuesta de la obra verdiana juega con la tradición y las referencias clásicas, experimentando con intuiciones para realizar una aportación poética y espiritual. Una creación en la que se expresan los grandes temas de reflexión del artista desde las expectativas truncadas de la modernidad, un arte entendido como un espacio para hacerse preguntas y poner en duda las cosas establecidas.

Una de las frases más fascinantes de toda la obra —“Sleep no more”— nos cuenta que, con el asesinato, Macbeth no sólo ha matado a alguien, sino que también ha acabado con la posibilidad de dormir tranquilo el resto de su vida. Estas palabras marcaron profundamente al artista, y en este sentido, la primera escultura con texto que realizó fue una pieza en hierro fundido con este fragmento de Macbeth.

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