Doce Notas - docenotas.com - m�sica y danza

Pensé en «sin concesiones» para esta reseña. El momento lo merecía. El “hostión” (perdón por la expresión, no volverá a suceder) que nos hemos pegado personal y socialmente lo justifica.

El maestro Bergia aparca por unos meses su retranca poética y se pasa a los textos ácidos, directos y reivindicativos de una mayor cordura y consideración social para lo que hace. Usando ritmos digitales, guitarras eléctricas saturadas, potentes bajos y voces muy pegadas a la melodía, muy propias del rock, como se aprecia en los primeros temas del disco: Paralelepípedos, Coser y Cantar, por ejemplo.

El largo tema central Pandemónium es un largo recitativo que describe el lodazal putrefacto en que se ha convertido este mundo – cautivo y desarmado me doy por vencido, la guerra no ha terminado– llega a decir entre guitarras hendrixianas y un bajo distorsionado manteniendo constante un ritmo reiterativo. Muy crimsoniano también.

El disco va acabando con temas que dejan lucir algo más el sol: Almohada. Vuelve al blues suave y guitarras del último Hendrix en Alas de Ícaro y a los desiertos sonoros jonimitchellianos con Mariposa de cristal. Magníficos textos.

Laura es una maravillosa versión del tema compuesto por Rodrigo García Blanca, «Rodrigo«. Aerosueño nos «trae de vuelta” de Buenos Aires y nos llena de nostalgia con sus sones arrabaleros.

Punto final: “se apaga la luna y sirio se enciende, buen viaje y hasta siempre”. Final Redondo.

Un placer que he tardado en disfrutar en parte porque me he entretenido en escribir alguna canción – sin mucha suerte- que reflejara un momento personal y social que describe Bergia con absoluta maestría, vano intento por mi parte que si volverá a suceder.

Pedidos en javierbergia.com y a disfrutar…o lo que se tercie en cada momento.

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