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La Bella Durmiente © Yan Revazov

El Staatsballet Berlín, que dirige Nacho Duato desde el pasado año, nació en 2004 con la refundación de los ballets de los tres teatros de ópera de Berlín: la Komische Oper, la Staatsoper Unter den Linden y la Deutsche Oper.

Traerá a Madrid, los días 4, 5 y 6 de septiembre, La bella durmiente, de Piotr Ilich Chaikovski, con la coreografía que ha creado Duato para la compañía del Teatro Mikhailovsky de San Petersburgo, de la que es director artístico desde 2011. Partiendo de la tradición rusa y de la versión de Marius Petipa, Nacho Duato ha hecho su primera incursión en el lenguaje del ballet clásico, que ha utilizado en su personal visión de la obra.

Duato ha explicado en la rueda de prensa de presentación, que esta versión de La Bella Durmiente «es un clásico renovado. He cortado algunas partes de la música, aunque sigue siendo un vocabulario muy clásico». El coreógrafo apuntó que ha rebajado la historia hasta convertirla «en un cuento, una historia de amor entre un príncipe y una princesa» a la que ha quitado «el polvo, el peso y a la que ha refrescado».

Sobre su primera incursión en el ballet clásico, Duato, apuntó que decidió hacer la Bella Durmiente «por decisión propia». «Cuando estaba en el Teatro Mikhailovsky de San Petersburgo, pensé, si no la hago ahora, cuándo la voy a hacer». Duato ha recordado que «cuando me invitaron a salir de la CND fue porque no hacía clásico, pero no es que yo no quisiera hacer ballet clásico, es que creo que hay que tener una infraestructura, un teatro, una orquesta, no se puede bailar La Bella Durmiente con una cinta. Cuando yo dirigía aquí sabía que no se podía hacer como se debía y yo no lo hice por respeto». «Me han pedido tantos años hacer clásico y yo he pedido tantos años un teatro, que ahora hago clásico que se baila en tres teatros».

El segundo programa, que se ofrecerá los días 8 y 9 de septiembre, está compuesto por una obra del alemán Marco Goecke -cuyo singular y personalísimo lenguaje coreográfico se podrá apreciar en And the Sky on that Cloudy Old Day– y por dos obras de Duato: White Darkness, que estrenó la Compañía Nacional de Danza en 2001, y Static Time, creada este año para el Staatsballett Berlin y que se presentará por primera vez en España y en de la que el coreógrafo explico que es una «reflexión sobre el duelo».

Vuelta a España

Duato se mostró muy contento de volver y dijo sentirse «mediterráneo», más que español. Sobre su futuro comentó que tiene contrato con el Staatsballett Berlín hasta 2017, «cuando me dirán si me voy o si me quedo». Anunció que después no tiene pensado volver a dirigir una compañía, aunque no tiene previsto dejar de trabajar porque sigue y seguirá supervisando sus coreografías que se siguen programando por todas partes del mundo. Precisamente sobre sus coreografías y el hecho de que la actual Compañía Nacional de Danza no tenga permiso para bailarlas, Duato se mostró conciliador. «Cuando yo me fui, me lleve mis ballets porque forman parte de mi propiedad intelectual, pero hay una puerta abierta y a mí me gustaría poder colaborar en el futuro para que esto cambie».

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