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El festival de Música Antigua de Aranjuez, organizado por la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Aranjuez e INAEM, bajo la dirección de Javier Estrella (Címbalo Producciones S. L.), celebra una edición reducida y excepcional en el marco de la pandemia, que ha abocado a la organización a trasladar su XXVII edición al otoño, a los fines de semana entre el 22 de noviembre y el 13 de diciembre.

La sede de los cuatro conciertos, a cargo de L’Apothéose, Cantoría, el clavecinista Andrés Alberto Gómez y Concerto 1700, será el Teatro Real Carlos III de Aranjuez, otra de las novedades que se incorporan al programa de este año, que sustituye el habitual horario vespertino por el matinal, a las 13:00, a excepción del concierto del 5 de diciembre, que se celebrará a las 19:00. Todos los eventos del festival se desarrollarán estrictamente de acuerdo a las medidas sanitarias establecidas. Además, con el objetivo de llegar a más público, el festival grabará los cuatro conciertos para su emisión en redes a través de una plataforma digital habilitada para tal fin.

La temática de la imitación de la naturaleza abre el nuevo ciclo

Fiel al lema del festival, el domingo 22 de noviembre, a las 13 h., el grupo L’ Apothéose inaugura la XXVII edición del Festival Música Antigua Aranjuez con su programa El Jardín de Aranjuez. Con cantos de pájaros y otros animales. Una incursión en la naturaleza y sus sonidos, que recupera la música de José Herrando (ca. 1720 – 1763) y que se completa con obras de inspiración bucólica de Telemann, Vivaldi, Schultze, Rameau y Händel. Para completar la inmersión en esta temática sobre La Imitación de la Naturaleza, el festival ofrece la ocpión de un paseo en barco inaugural por el Tajo esa misma mañana, antes del concierto, a las 11:30, que partirá del Club de Piragüismo de Aranjuez. Estará guiada por el arquitecto Félix Atienza y nos acercará a la historia de estos jardines, que son precisamente los que inspiraron la obra de Herrando.

El ensemble madrileño L’Apothéose, encargado de abrir el ciclo, está considerado una formación de referencia que ha llevado la interpretación histórica al nivel más alto con un repertorio camerístico que abarca desde el barroco temprano hasta el final del clasicismo. Invitado a los más prestigiosos festivales y salas de concierto, ha alcanzado, entre otros, el primer premio de la Händel Competition de Göttingen, Alemania, el premio Eeemerging que concede la UE en el festival de Ambronay, el segundo premio en el festival Oude Muziek de Utrecht, el Premio FestClásica 2018, Premio Grupo Joven 2017, de la asociación GEMA.

MAA 2020 continúa el domingo 29 de noviembre con el cuarteto vocal Cantoría, a las 13 h. El conjunto especializado en la música vocal de la Edad de Oro española interpretará, con una muy novedosa puesta en escena, un delicioso programa: Lenguas Malas, que reúne la música de Mateo Flecha, Juan del Encina, Juan de Anchieta, Francisco Guerrero o Bartomeu Cárceres para explorar el carácter teatral de la música y su relación con los textos literarios.

La música de Scarlatti llegará el sábado 5 de diciembre con el clavecinista Andrés Alberto Gómez, a las 19 h. Bajo el epígrafe Domenico Scarlatti, Bárbara de Braganza y el clave, el prestigioso músico, fundador y director del ensemble La Reverencia rinde homenaje al que considera “el clavecinista con mayúsculas, un maestro del cémbalo” y a la relación de maestro-alumna que le vinculó con la reina María Bárbara de Braganza, durante más de 35 años. “En las sonatas de Scarlatti se escuchan los ecos de Gasparini, la prosa de la melodía de Corelli, la tradición de los Partimenti napolitanos, el jolgorio de las calles sevillanas, la indolencia de los palacios madrileños, lo humilde, lo pretencioso, lo caduco y lo eterno”, nos recuerda Gómez.

La clausura de la XXVII edición tendrá lugar el domingo 13 de diciembre a cargo de Concerto 1700, que dirige el violinista Daniel Pinteño. Su programa Tríos de cuerda en los tiempos de Brunetti. Haydn, Brunetti y Boccherini gira en torno a la figura de Brunetti, máximo responsable de la música que se interpretaba en la cámara de Carlos IV, rindiendo a la vez homenaje a Luigi Boccherini, uno de los compositores más apreciados del siglo XVIII, que llegó a rivalizar en fama con Haydn, especialmente en Francia. Este banquete musical pone un cierre de altura a esta edición del festival que pronto alcanzará los 30 años de existencia, como muestra de la buena salud de la música antigua en nuestro país.