Doce Notas

Carta del Jefe de estudios del RCSMM a Anna Melnikova y su respuesta

CONTESTACIÓN DEL JEFE DE ESTUDIOS, D. ALEJANDRO ROMÁN, A DÑA. ANNA MELNIKOVA

A Dª Anna Melnikova:

Voy a contestar uno a uno a los puntos que me atañen, tanto como Jefe de Estudios del Centro como Profesor aludido en tu escrito.

Te exijo que, para exponer tus solicitudes, sigas los cauces legales pertinentes y dejes de enviar correos tan faltos de educación y de respeto que incluyen comentarios irónicos y despectivos para con los profesores a los que aludes. Nadie puede negar que en tus exigencias pueda haber algunas razones para mejorar, y en algunos puntos incluso puedas tener acierto en tus demandas, pero tal y como lo expones, y por tus formas radicales, pierdes toda legitimidad.

Te comunico que, dada tu falta de asistencia a la última clase de la asignatura de Composición impartida por tu profesor D. Manuel Seco, el inspector dio por zanjada tu petición, ya que no compareciste a la reunión con él. La clase comienza a las 12:00, yo mismo fui a buscarte al aula en tres ocasiones, sin resultado, y estuvimos esperándote hasta las 14:30. Por ello el inspector, que quería que expusieras tus denuncias, se fue y me dijo que con ello concluía su labor.

Estos son los puntos de tus alusiones hacia mí:

1. Te refieres a mí como: “el famoso jefe de estudios encargado de organizar las disparatadas parrillas horarias de las que “disfrutamos” en esta REAL casa, que impiden a los alumnos conciliar sus estudios con su vida familiar y laboral”

¡Qué extraño es todo lo que dices acerca de tus horarios en el Centro… ! Resulta que consultando tu expediente me encuentro con que los “famosos horarios” que impiden conciliar tu vida familiar y laboral, prácticamente los realizas en un solo día, el martes, de 9:00 a 15:00 y de 15:30 a 18:30. El resto de asignaturas se disponen en otros días, pero sabiendo que estás matriculada en asignaturas ¡de tres cursos distintos! es casi un milagro del que yo mismo me admiro… Vienes un solo día y del tirón haces 5 de las 9 asignaturas (de 2º y 3º) que tienes durante el curso. Los días restantes (lunes, miércoles y jueves por la tarde) tienes cuatro asignaturas de diferentes cursos, 2º, 3º y 4º… Como comprenderás, el Jefe de Estudios ha de coordinar bien los horarios de las asignaturas de cada curso, pero es imposible hacer un horario “a medida” para cada alumno, y más sabiendo que muchos de vosotros estáis

cursando dos y más carreras al mismo tiempo (dentro y fuera del Conservatorio) y trabajando también.

Dices: “porque si una sale del conservatorio a las 21.30 y llega a su casa a las 23.00 y tiene que estar hasta las 2.00 haciendo los trabajos que ha sido imposible realizar en el centro porque sus características lo impiden, dormir 4 horas y al día siguiente pegarse un madrugón para regresar al conservatorio y volver a tener el mismo horario obstaculizante y disparatado… a ver qué familia puede permanecer sana y unida si se ve arroyada por este tren de vida;”

Ese “tren de vida” es una elección personal, el único día que sales a esa hora son los miércoles, y ha sido decisión tuya, porque hay oferta de la misma asignatura los Jueves por la mañana. No me puedes culpar a mí de tu elección. De todos modos el Conservatorio tiene horarios lectivos desde las 9:00 hasta las 21:30, y eso sí que no es cosa mía, es el horario que dispone la Consejería de Educación.

Además en tu caso, que estudias una licenciatura en la Universidad e incluso trabajas, como comprenderás no puedes achacar tu falta de tiempo y tu caos organizativo a los demás. Tu petición parte de una base muy falsa, y por tu parte lo haces de forma muy malévola. No te lo consiento.

2. Sigues diciendo: “el mismo jefe de estudios se encarga de la organización interdepartamental – eso explica la imposibilidad de acceso de los compositores a los intérpretes, y eso que algunas guías docentes bien hechas lo contemplan, pero el jefe de estudios obstaculizó cualquier contacto, y por lo tanto un correcto desarrollo de las actividades programadas, desde el principio del curso;”

En cuanto a la organización interdepartamental nunca es trabajo del Jefe de Estudios, es labor del propio Seminario y en última instancia del responsable de la asignatura, nunca del Jefe de Estudios. El Jefe de Estudios puede facilitarlo a petición del Seminario, y de hecho lo ha facilitado durante el curso pasado por voluntad propia y sin la obligación de hacerlo, pero en último término es labor de los profesores del Seminario correspondiente. La asignatura “Técnicas Instrumentales Extendidas” ha de impartirla el profesor/a de la asignatura, y los contenidos, expresados en la Guía Docente correspondiente, no implican nunca al Jefe de Estudios, esa no es su labor, es labor del Profesor/a, y el tiempo dedicado a ello está expresado en sus Horas Complementarias correspondientes. Me gustaría saber qué información tienes al respecto, cuáles son tus fuentes, como para saber tú si he obstaculizado en algún momento la labor docente. No es el caso y nunca lo ha sido, muy al contrario.

3. Dices: “es el mismo jefe de estudios que no sólo tolera que no haya un Reglamento de Régimen Interno, sino que además pone todos los medios a su alcance para demorar que tal estatuto aparezca, no vaya a ser que a los alumnos amparados por el RRI les dé por protestar con razón”

Esta acusación sí que no la comprendo ni la puedo aceptar. Desde el mes de febrero de este año formo parte de la Comisión de Convivencia del Centro junto con el Sr. Director y el Representante de alumnos. Llevamos trabajando desde entonces en el Reglamento de Régimen Interior, que está sin aprobar desde tiempos inmemoriales. Hemos tenido algunas reuniones y ya tenemos un borrador redactado que ha de someterse a los cauces legales pertinentes. Precisamente me acusas de obstaculizarlo cuando ¡nosotros somos quienes lo estamos impulsando!

4. Y terminas con la siguiente “perla”: “y por último porque también me dio clase y sé de primerísima mano que comete pecados imperdonables que IMPOSIBILITAN EL DESARROLLO ADECUADO DEL ALUMNADO – funciona sin una guía docente adecuada, muy parecida al documento elaborado para Composición II, no se prepara las clases, comete errores a la hora de explicar contenidos, y consagra el 90% de la clase a sostener charlas amables con el alumnado (sobre su vida privada, por supuesto).”

Esta afirmación es la que más me apena de todas, porque para mí los alumnos sois lo más importante, dedico mi vida a la enseñanza y tengo vocación por ella desde siempre. Mi primera clase la di con 15 años, y desde entonces no he parado un solo momento de ser profesor. Profesionalmente llevo dando clases veinte años, y puedo asegurar que nunca he tenido un problema con un alumno/a. Quiero y respeto a todos mis alumnos por igual, y sólo pido que me devuelvan ese respeto con el que los trato. Doy todo lo que sé sin egoísmos, puede que a ti te pareciera poco, es posible, pero no acepto que digas que cometo “pecados imperdonables”, porque creo que algo más sabía que tú en el momento en que cursaste tu primer curso de “Composición Aplicada” como para corregirme en este punto. En el año 2011 estuviste en mi clase, eras alumna de la Carrera LOGSE de Pedagogía del Piano, y yo te acogí como buena alumna que parecías ser. Cumpliste un buen curso, y yo mismo te animé a seguir con los estudios de Composición, como animo a muchos de mis alumnos que tienen capacidad para ello. De hecho me alegré cuando vi que seguiste la carrera un tiempo después.

En cuanto a la “Guía Docente adecuada” dudo que la pudieras consultar, ya que en ese momento, y tratándose de LOGSE, no existían, teníamos las Programaciones LOGSE correspondientes. También dudo que tú en ese momento fueras capaz de hacer una crítica con fundamento a las Programaciones Didácticas, ya que eras una alumna que comenzaba con la Composición de forma tangencial (la asignatura es una complementaria de la antigua carrera de Pedagogía Instrumental).

Por otra parte, que no me preparara las clases tú no lo puedes saber, aunque puedo decirte que no es cierto, porque preparo cada clase antes de impartirla, y en especial pensando en el grupo que voy a tener ese día. Cometer errores a la hora de explicar los contenidos, es posible, soy profesor pero no soy infalible y me puedo equivocar, pero te deseo que si alguna vez tienes una carrera profesional como docente, y en alguna ocasión cometes un error, no te sea juzgada toda ella por un hecho aislado y puntual.

Lo que sí es falso rotundamente es que dedique el 90 % de la clase a sostener “charlas amables” con los alumnos sobre mi vida privada. Creo que poner ejemplos sobre la experiencia musical y profesional no es hablar de la vida privada, es enriquecedor para los alumnos, que pueden percibir de primera mano las experiencias de un músico en activo. Así pienso que los alumnos lo reciben, porque en un Conservatorio Superior la experiencia de los profesores es fundamental.

Sin embargo, sí puedo decir que quizá ese enconamiento que tienes se deba a que tuve que llamarte la atención en reiteradas ocasiones por faltas de respeto hacia mí y hacia tus compañeros por estar hablando o consultando el correo personal en tu ordenador mientras explicaba en la pizarra, haciendo que me distrajese de mi explicación. Tus exigencias en la clase en ese momento fueron en un tono inaceptable, muy parecido al de tu correo electrónico que envías a profesores y compañeros. Sin embargo accedí a cambiar los contenidos de clase bajo tu exigencia, pero con el consentimiento de tus compañeros de aula. Veo que eso no fue suficiente para que valoraras en mí mi buena disposición hacia ti. Esa ha sido mi actitud siempre, la del diálogo y la comprensión incluso ante situaciones o personas complicadas. No reconozco en tus palabras escritas todo lo que aseveras sobre mí.

Los problemas del colectivo de alumnos los tomo como propios, por eso, las reivindicaciones justas del colectivo las tendré siempre en cuenta como Jefe de Estudios. Ya estoy en contacto con el Representante de Alumnos para que me dé las impresiones de los alumnos acerca de los horarios y tratar de mejorar lo que se pueda mejorar para el próximo curso. Así se hacen las cosas, juntos y no en confrontación.

No sé si eres consciente de que estás poniendo en tela de juicio el trabajo de todo un Departamento de Composición, formado por excelentes músicos y profesores, que han elaborado las programaciones de las Guías Docentes a partir de la experiencia docente de muchos años, y que han sido refrendadas por toda la Junta de Departamentos. Y por favor, te pido que la próxima vez que tengas un problema personal no pongas en evidencia todo el desarrollo organizativo de un Centro tan complejo como el Real Conservatorio porque no se atiende a tus demandas particulares.

Un saludo cordial,

Alejandro Román

———————–

Alejandro Román Compositor Profesor de Composición, Orquestación y Composición para Medios Audiovisuales, Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Aula CINEMA

Jefe de Estudios del RCSMM

*****

 

RESPUESTA DE DÑA. ANNA MELNIKOVA

A D. Alejandro Román.

Lo primero, he de felicitarle por lo bonita que ha quedado este año la ceremonia de graduación, había gente muy importante, la Directora General, la Subdirectora General, el director y demás miembros del equipo directivo. Aunque eché en falta al importantísimo inspector, el inspector merecedor de un concierto privado en su bodeguilla, espero que su ausencia se debiera a algo tan justificado como otra prueba acústica en la misma, o que la lata de mejillones y el vino del Mercadona de aquel memorable día le hubieran sentado mal en diferido.

Por lo demás, me congratulo de haber conocido una cualidad suya que en esta época de ciencia y racionalidad está menospreciada: LA PREMONICIÓN. Sólo así puedo entender que se haga una ceremonia de graduación sin que los profesores hayan puesto las notas finales y sin que los alumnos sepan las mismas y por lo tanto si se gradúan o no. Por supuesto, esta cualidad que yo no poseo es de enorme beneficio para el centro porque así, sin tener en cuenta el calendario escolar que dice que todavía quedan algo más de dos semanas de curso, tanto los profesores como los alumnos no tienen que soportar la pesada tarea de asistir a clase, evidentemente innecesarias tras la graduación. Además, sin tener en cuenta qué alumnos se gradúan de manera real o no, se permite en un alarde igualitario que todos, aprueben o suspendan, puedan participar de ese bello momento: EL DE SER FOTOGRAFIADOS JUNTO A SU DIRECTOR. A partir de ahora cuento con anhelo las horas para participar de ese instante fugaz, pero imperecedero en la memoria.

En cuanto a que siga los cauces legales pertinentes, así trato de hacerlo, presento escritos y los paso por registro. Dada la ineficacia de los procedimientos normativos en esta ocasión he querido poner en conocimiento de toda la comunidad educativa lo que está sucediendo a través del correo electrónico. Hacerlo así es un derecho que me asiste, el de la libertad de expresión que tanto le incomoda y sobre el que usted, D. Alejandro, no tiene ninguna prerrogativa. Se queja usted de que mi escrito anterior es falto de respeto y de legitimidad. Bien pues, como le decía, la libertad de expresión está consagrada en la Constitución, y la ironía y el sarcasmo forman del lenguaje. El insulto no es procedente y por eso no forma parte de mi escrito anterior, pero tampoco forma parte del mismo la mentira, cosa de la que usted sí peca en su contestación.

Veamos lo que usted relata: “dada tu falta de asistencia a la última clase de la asignatura de Composición impartida por tu profesor D. Manuel Seco, el inspector dio por zanjada tu petición, ya que no compareciste a la reunión con él”. Primero, a mí no se me convocó a ninguna reunión con el inspector – como le he dicho carezco de capacidades premonitorias y no puedo adivinar el futuro ni las intenciones de los demás -, por lo que si había una reunión y se me ignoró, es porque usted como Jefe de Estudios no me convocó, más aún usted, D. Manuel Seco y el inspector me vieron en ese horario en el centro y no me dijeron nada al respecto. Por lo tanto, es usted el que no siguió los cauces normales y esa reunión se convirtió en una encerrona para mis compañeros de clase. Segundo, ¿cómo es posible que usted como Jefe de Estudios convoque una reunión en el horario de clase, sabiendo además que en fechas recientes ya se había perdido otra? ¿La vamos a recuperar? Tercero, sólo para recordarle sus funciones le apunto que en vez de controlar las faltas de asistencia de los alumnos debería controlar las irregularidades que cometen en este aspecto los profesores. En su caso, sabiendo que D. Manuel Seco es muy dado a cometer este tipo de pecadillos no sólo mira hacia otro lado sino que además lo encubre ¿me puede contestar por qué?

Como bien sabe, yo fui a la clase de D. Manuel Seco el 20 de mayo. Esta clase, que por razones que usted conoce, se cambió de ubicación para que yo no pudiera asistir a la misma. En el pasillo me encontré con usted, D. Manuel Seco y el inspector D. Francisco Alonso, les pregunté por la clase ya que el aula habitual estaba vacía y D. M. Seco me respondió que ya estaban en clase, ocurrencia que usted rio junto a los demás. Este cambio de ubicación al despacho del Vicedirector, D. Manuel Seco, se hizo porque se invitó a mis compañeros a reunirse con ustedes tres para recoger información acerca de mí, y que yo no pudiera contemplar y conocer esta lamentable maniobra al no encontrar la clase. Claro que sus intenciones eran las mejores, cerrar arteramente todo este asunto. Uno de mis compañeros se negó a comentar nada, el otro accedió a hablar y mostrando un coraje admirable corroboró todo lo relativo a mis quejas ante la sorpresa de los miembros del equipo directivo presente y el Inspector. Afortunadamente, ese día tuve la precaución de sacar varias fotos de ustedes tres en el pasillo muy satisfechos con la jugada, por las cosas de la electrónica las fotos están perfectamente datadas en esa fecha y en la hora correspondiente a la clase, demostrando tanto mi presencia como la suya en el lugar que estoy diciendo. Por lo tanto, D. A. Román usted está mintiendo en su correo y este hecho y las fotografías los pondré en conocimiento de las instancias pertinentes y de la comunidad educativa.

Por otro lado, usted muestra un desconocimiento de los procedimientos y de las vías normativas de comunicación. Como usted conoce yo he presentado varios escritos al Departamento de Composición, a la Jefatura de Estudios, al Director y a la Inspección. Lo procedente es que la respuesta de la Inspección la haga la Inspección misma a través de los cauces reglamentarios y por escrito, no usted. Su comunicación, suplantando a la Inspección muestra una falta de respeto por los procedimientos, por la Inspección Educativa, por los cauces establecidos y por los derechos de los alumnos, o simplemente, desconocimiento en cuyo caso espero haberle servido de ayuda. Como su “respuesta” carece de legitimidad y no tiene ningún valor efectivo, aprovecho esta oportunidad para decirle que a fecha de hoy, el inspector no me ha comunicado nada todavía, cosa que me preocupa dada que su llamativa ausencia en la ceremonia que podía haber compartido con las autoridades de la Administración Educativa y sus amigos de la bodeguilla.

En lo relativo a la organización de los horarios, que es una de sus competencias, le comento que en cualquier centro universitario, ¡¡a cuyo estatus el RCSMM quiere acceder!!, los alumnos tienen turnos de mañana o de tarde para las clases, si bien puntualmente tengan prácticas de laboratorio etc. fuera de una parrilla general. Los alumnos del RCSMM tenemos horarios dispersos a lo largo de la semana con clases por la mañana y por la tarde. Yo misma, como alumna de 2º curso tengo clases:

Lunes: 20h30- 21h00 Instrumento complementario

Martes: 12h00-15h00 Composición

17.30-18.30 Informática Musical

Miércoles: 19.30-21.30 Orquestación II

Como alumna de 3º:

Lunes: 13.30-15.00 Técnicas de Dirección

Martes: 9.00-11.00 Análisis de la música de los ss.XX-XXI

11.00-12.30 Electroacústica

15.30-17.30 Técnicas extendidas (1 vez cada dos semanas)

Si estas dos plantillas se toman por separado y se les añaden las asignaturas que faltan salta a la vista que este horario es cualquier cosa menos compacto.

Si estuviese cursando sólo 3º de composición mi horario de los martes sería el siguiente:

9.00 – 11.00 Análisis de la música de los ss. XX-XXI

11.00 – 12.30 Electroacústica

15.30 – 17.30 Técnicas extendidas

19.30 – 21.30 Orquestación

Lo extraordinario es que cursando asignaturas de 3 cursos diferentes haya conseguido un horario más compacto que cursando las asignaturas de un curso completo. Evidentemente, cuando usted organizó estos horarios, que parecen los dientes mellados de un jugador de rugby por la cantidad de huecos que hay, pensaba en mí.

En cualquier caso es de agradecer su aparentemente sincero interés y sus esfuerzos por hacer horarios compactos para cada curso que beneficien a todos los alumnos, no sólo a mí, pero dado que hasta la fecha no ha habido suerte le sugiero que lo haga de manera aleatoria y así puede que alguna vez, por probabilidad pura, salgan franjas horarias compactas. Además la aleatoriedad le ahorraría mucho tiempo de elaboración: el resultado sería similar y los alumnos podríamos conocer los horarios antes de empezar el curso y no en Noviembre como ha ocurrido en este REAL conservatorio una vez más. Por lo tanto, mi caos está provocado por el que impera en esta casa, de la que usted es responsable y cuyos horarios se elaboran sin pensar los alumnos.

Asimismo, quiero hacerle observar que no necesito ningún consentimiento para presentar mis escritos, quejas o reclamaciones, estén fundados o no, es un derecho que me asiste y que no necesita de su aprobación. Le sugiero comprobar que el franquiense ya pasó, aunque no lo parezca en el RCSMM. Los estudiantes tenemos derechos inalienables aunque a usted le pese. Tal vez por eso, las instrucciones de curso en las que se explicitan ciertas normas y procedimientos que afectan a todos los colectivos, entre ellos los de reclamación de los alumnos, no están colgadas en la web del centro, no me han facilitado cuando las he pedido, ni se han distribuido entre los representantes de los alumnos. Entiendo que ustedes proceden

porque saben que el hecho de ocultar la información, mantener a los alumnos en la estulticia como si fueran enemigos y aprovecharse de su inocencia – y pasividad – les otorga mayor poder, les felicito por su conocimiento de las estrategias orwellianas. Si ésta no ha sido su intención le ruego me haga llegar a mí y al resto de la comunidad educativa a la mayor brevedad un ejemplar completo de dichas instrucciones.

En el segundo punto afirma que NUNCA ES FUNCIÓN DEL JEFE DE ESTUDIOS la organización interdepartamental. Como no tengo las instrucciones de este curso no puedo afirmar si es competencia de los ordenanzas o de los servicios de limpieza, que en este centro todo puede ser, pero más abajo le facilito lo que dice el Real Decreto 83/1996, Reglamento Orgánico de los Institutos de Secundaria, norma que en ausencia de una específica para conservatorios nos vale:

Artículo 33. Competencias del Jefe de Estudios:

a. …

b. ..

c. Coordinar las actividades de carácter académico, de orientación y complementarias de profesores y alumnos, en relación con el proyecto educativo, los proyectos curriculares de etapa y la programación general anual y, además, velar por su ejecución.

d. ..

e. Coordinar las actividades de los jefes de departamento.

f. …

A mí parece que eso de coordinar cosas sí es función que le corresponde. En cualquier caso, sabiendo que está elaborando el Reglamento Orgánico de centro o Reglamento de Régimen Interior del RCSMM supongo que será de interés informativo para su trabajo este Real Decreto. También supongo que será de su interés para e lROC o RRI, el Real Decreto 1791/2010, Estatuto del Estudiante Universitario, en el que entre otras cosas se dice lo siguiente:

Artículo 7. Derechos comunes de los estudiantes universitarios.

1. Los estudiantes universitarios tienen los siguientes derechos comunes, individuales o colectivos:

a) Al estudio en la universidad de su elección, ….

b) A la igualdad de oportunidades, sin discriminación alguna, en el acceso a la universidad, ingreso en los centros, permanencia en la universidad y ejercicio de sus derechos académicos.

c) A una formación académica de calidad, que fomente la adquisición de las competencias que correspondan a los estudios elegidos e incluya conocimientos, habilidades, actitudes y valores; en particular los valores propios de una cultura democrática y del respeto a los demás y al entorno.

d) A una atención y diseño de las actividades académicas que faciliten la conciliación de los estudios con la vida laboral y familiar, así como el ejercicio de sus derechos por las mujeres víctimas de la violencia de género, en la medida de las disponibilidades organizativas y presupuestarias de la universidad.

e) Al asesoramiento y asistencia por parte de profesores, tutores y servicios de atención al estudiante, de conformidad con lo dispuesto en este Estatuto.

f) A la información y orientación vocacional, académica y profesional,…

g) A ser informado de las normas de la universidad sobre la evaluación y el procedimiento de revisión de calificaciones.

h) A una evaluación objetiva y siempre que sea posible continua, basada en una metodología activa de docencia y aprendizaje.

i) A obtener reconocimiento académico ….

j) A la validación, a efectos académicos, de la experiencia laboral ….

….

p) Al acceso a la formación universitaria a lo largo de la vida, para lo cual las universidades establecerán y difundirán los mecanismos específicos de admisión que correspondan.

Como observará le he marcado en negrita aspectos generales que no se cumplen en el RCSMM como el punto d. y otros que no se han cumplido en todo este asunto conmigo. En cuanto al impulso que le están dando al RRI, sólo tengo dos puntualizaciones: 1) si no está aprobado – aunque sea desde los tiempos inmemoriales – es igual a decir que a todos los efectos no está hecho 2) no puedo evitar manifestar mi preocupación por ese documento porque habiendo comprobado en carne propia cómo procede el equipo directivo sólo queda esperar del mismo indefensión para el alumnado y el profesorado que no sean sus acólitos.

En lo relativo a sus clases, si usted cree que consagrar el 90% de la clase a hablar de sus experiencias personales es fundamental, debería proponer que se incluyan dentro de los contenidos de las Guías Docentes (por cierto, acepto su corrección terminológica). En otras asignaturas, como Literatura o Historia, se incluyen contenidos relativos a la vida, la obra y los milagros de diversas ilustres figuras, por lo tanto en la técnica educativa no hay objeción alguna para que estas enriquecedoras experiencias sean incluidas. En nuestro caso en particular le reconozco que esa parte de sus clases me aburría profundamente, aunque si sus apasionantes relatos hubieran suscitado mi interés por esas experiencias vitales a la manera que lo hace SuperNanny – de la que extraigo al menos alguna conclusión psicosocial y pedagógica – habría prestado más atención. Yo esperaba que usted se ciñera a la materia y a la programación didáctica tal y como le reclamé en más de una ocasión. Así que, cuando las clases no se adecuaban a lo estrictamente académico yo trataba de adelantar otros trabajos o estudiar algo que fuera formativamente más relevante, no miraba el correo, estudiaba y trabajaba con el portátil. No obstante, trataré de solucionar esta laguna formativa pidiendo los apuntes de mis antiguos compañeros, que siendo conscientes de su importancia sin duda

alguna los habrán recogido. Por lo demás, si los contenidos de clase se cambiaron por ¿mis exigencias?, sería en todo caso porque de forma tácita se reconocía lo inadecuado de los anteriores.

En cuanto a su referencia a mi falta de criterio para juzgar su programación didáctica sólo le puedo decir una cosa: sigo conservando aquella programación didáctica en mi poder y le aseguro que cualquier persona, por muy poco versada que sea en el intrincado arte de hacer las programaciones, puede comprender lo inadecuado de sus formas y de sus contenidos. De hecho, aquella programación la usamos en cierta clase como un ejemplo de ELABORACIÓN DEFICIENTE DE ESTE TIPO DE DOCUMENTOS.

Por cierto, ya que usted se ha atrevido a hacer pública esta carta privada a mí, me siento con total libertad de difundir tanto su carta como mi contestación a ella a toda la comunidad educativa.

Un saludo cordial,

Anna Melnikova

 

______________________

Noticias relacionadas

Queja de una alumna del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid

Rectificación de Anna Melnikova a su queja del RCSMM publicada en Doce Notas

Cartas de Luis Ángel de Benito al Claustro de profesores del RCSMM

Incidentes en el Conservatorio Superior de Madrid. ¿Cuándo he visto yo esto?

Carta de Anna Melnikova a la Comunidad Educativa

Carta de un alumno de 2º de composición del RCSMM sobre los sucesos del 27 de mayo 2014

Salir de la versión móvil