Si entonces fue una producción del Grand Théâtre de Ginebra, ahora un montaje coproducido por el Festival de Salzburgo y la Opéra National de París, que en junio de 2012 se verá en el Liceu barcelonés.
De compendiar el simbolismo de Maetterlinck y la música impresionista -de nihilista se calificó tras su estreno en 1902- en la que transcurre el triángulo amoroso de la trama, se encarga el artista de la vanguardia teatral Robert Wilson. El reparto revela la fidelidad del director del coliseo, Gerard Mortier, por sus colaboradores. Dando vida a la protagonista, la soprano Camilla Tilling, arropada por la recepción como el ángel del San Francisco de Asís que cerró la temporada madrileña.
Dándole la réplica como Pelléas, el tenor francés Yann Beuron, que coincidió con Mortier en su etapa parisiense, y parece afianzarse en Madrid, donde se le vio a comienzos de este año en Ifigenia en Tauride, y donde regresa en febrero en el rol titular de La clemenza di Tito. Cerrando el triángulo amoroso de la historia, el barítono Laurent Naury -señor de Faninal del reciente Caballero de la rosa en el mismo escenario- será Goulod. Completando cartel, Hillary Summers, Franz-Josef Selig y Jean-Luc Ballestra. Y al frente del cometido musical, Sylvain Cambreling, batuta referencial de Mortier desde su paso por la Monnaie de Bruselas.