Julia Kogan y Jean-Marc Andrieu en Vivaldi Fioritura. ©J.J. Ader
La Orquesta Les Passions celebraba la pasada semana sus 25 de años de vida con dos conciertos del programa Vivaldi floritura: arias de opéra, motetes y conciertos. El primero, en Montauban, ciudad que en la actualidad apoya en calidad de résidente al conjunto musical que dirige Jean-Marc Andrieu. El segundo, en el centro Odyssus de Toulouse, donde en 1986 nació Les Passions por iniciativa del propio Andrieu, que compagina su trabajo directorial con la actividad como flautista. En esos dos papeles se desdobló para las florituras vivaldianas, en las que tuvo la oportunidad de lucirse como solista en La tempesta di mare, primero de los seis Conciertos para flauta, cuerda y contínuo incluídos en el Opus 10 del Pretre Rosso.
Aunque la mayor gloria de la velada le cupo a Julia Kogan, la soprano coloratura ucraniana, educada en los Estados Unidos y en la actualidad résidente en Francia. Kogan, tras vencer las barreras de agilidad que inicialmente puede plantear el compositor veneciano en partituras como la de Arsilda Regina di Ponto con la que le correspondió arrancar, fue dejando aflorar la bravura que requieren ese casi centenar de opéras que Vivaldi pudo haber escrito para complacer los encargos de todos aquellos teatros de Europa que se las solicitaban. Una vez los motores a punto, Julia Kogan encandiló al respetable con los motetes de In Furore Giustisima Irae, RV 626, contando en todo momento con el respaldo complice de unos músicos tocados por la gracia.
Les Passions en Zaragoza
En ese estado, el próximo 3 de mayo Les Passions debuta en la iglesia zaragozana de Santa Isabel de Portugal con De París a Versalles, un nuevo programa para tres voces masculinas estructurado a partir de obras de Couperin, Charpentier y Marin Marais, que han paseado por distintas partes de Europa, y que llevarán al disco tras su rodaje. De París a Versalles se unirá así al proyecto emprendido por Les Passions conjuntamente con el coro de Cámara de Les Éléments (que erróneamente habíamos anunciado estaría también en Zaragoza el 3 de mayo) para rescatar en tres fases las obras mayores de Jean Gilles. La primera, hace dos años, concluyó con la grabación del Requiem, galardonada con diversas distinciones, incluída la de Revelación 2008 del Festival de la Chaise de Dieu. El siguiente paso, tras recuperar para un nuevo programa las Lamentaciones, consistirá en la programación hasta 2012 del Te deum del compositor de Tarascón, así como la Misa en Re, que aun permanece inédita.