Durante el mes de septiembre, Antoni Ros-Marbà padeció una serie de episodios de taquiarritmia que se han vuelto a reproduir durante la pasada semana y que le han llevado a ser baja a última hora, teniéndose que someter por prescripción médica a un tratamiento de reposo, según el comunicado médico facilitado al Teatro.
Delante de esta situación, la dirección artística y la Direcció musical del Liceu han optado por la maestría y veteranía de Ralf Weikert, una opción que satisface plenamente al Teatro dada la gran calidad del maestro en una obra tan difícil y delante de un cambio repentino. Weikert se incorpora hoy lunes a los ensayos de la Orquesta.
En su dilatada trayectoria profesional, Weikert ha sido director musical de la Bonn Oper, director artístico y titular de la Ópera de Frankfurt, director artístico de la Ópera de Zurich, director titular de la Mozarteum Orchestra y del Landestheater de Salzburg.
Es invitado habitual de los festivales de Salzburg, Aix-en-Provence, Bregenz y Arena di Verona, entre otros. Ha actuado en los teatros y auditorios más importantes del mundo, como la Staatsoper de Viena, Bayerische Staatsoper, Deutsche Oper de Berlín, Metropolitan Opera de Nova York y San Francisco.