Por todo ello, esta caja que contiene toda su producción sinfónica resulta una pieza extraordinaria. Se trata de trece obras, su integral, con más de 9 horas de duración, recogidas en ocho cedés y en formato económico.
Los protagonistas de esta tares son La Orquesta Sinfónica de la SWR, una de las orquesta alemanas surgidas tras la guerra y con una historia de apoyo a la creación contemporánea apabullante, con más de 400 estrenos; el director francés Sylvain Cambreling (que el aficionado madrileño habrá evaluado en su último Saint François d’Assise) y solistas de la talla de los pianistas Roger Muraro, Florent Boffard, la mezzo Yvonne Naef o la martenotista Valérie Hartmann-Claverie.
Un elenco formidable para toda una hazaña discográfica que el aficionado deberá tener en cuenta por su calidad y porque quizá pase mucho tiempo antes de que puede encontrar algo parecido.