Madrid, 15 septiembre 2012 © Doce Notas
El Ayuntamiento de Madrid cuenta en estos momentos con 13 escuelas de Música y danza que gestionan dos empresas privadas, Escuela Música Creativa y Soto Mesa S. L., ambas pioneras en la educación musical en Madrid.
Según las noticias que han ido apareciendo en la prensa y en blogs de profesores y alumnos, de los que nos hemos ido haciendo eco, da la sensación de que los responsables municipales no parecen pronunciarse –a una semana del comienzo del curso–, de si finalmente la enseñanza municipal de la música adquirirá unos costes superiores al 100 % de lo que ahora pagan los alumnos, tanto niños como adultos, o recapacitarán sobre las posibles consecuencias. Es importante recordar aquí, que las escuelas municipales de música se caracterizan precisamente por no exigir un límite de edad a los alumnos, porque en esto se ha apoyado principalmente el Ayuntamiento para considerarlas fuera de un marco educativo.
Merece la pena que por un momento nos olvidemos de si el Ayuntamiento deja de subvencionar las escuelas de música, si hará pagar el total de lo que ahora cuesta esta enseñanza al alumno y echemos un vistazo a lo que dice la ley.
A nadie se le escapa que la reglamentación de las escuelas municipales de música y danza debería ser supervisada a fondo a favor siempre de la educación musical. Esto es algo que no ignoran las empresas adjudicatarias que se ven obligadas a contratar bedeles, gerentes o directores, una estructura antieconómica para gestionar cada uno de los centros. Estas imposiciones, evidentemente encarecen el precio y, antes de pensar en hacérselo pagar a los alumnos podría haberse hecho un esfuerzo por cambiar la legislación actual.
Algo se mueve
La Consejería de Enseñanza de la Generalitat de Cataluña está ultimando un decreto sobre las “enseñanzas artísticas no regladas de música y danza”, donde se ubican las escuelas municipales, para actualizar los contenidos de esta formación.
Una de las novedades de esta normativa es que un 15 % del profesorado podrá carecer de titulación específica en danza y música. Para ello se apoyan en las nuevas especialidades que no disponen de formación específica y de esta manera se deja abierta la posibilidad de que los docentes, en lugar de ser titulados superiores, puedan acreditar su formación en determinados ámbitos. Este es también un viejo caballo de batalla en la enseñanza pública no reglada: la titulación superior del profesorado.
Por su parte, la Asociación Catalana de Escuelas de Música y Danza, la única que parece estar “activa”, presentó las alegaciones correspondientes a este decreto, ya que no recogía las indicaciones hechas por las escuelas asociadas y transmitidas al Departamento de Educación”. Una de las alegaciones tenía como fin el mejorar el texto propuesto para que todas las escuelas de música puedan escoger libremente la metodología a emplear en las clases de instrumento.
La legislación y las escuelas municipales de música
Hace apenas un mes que se cumplieron los veinte años de la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la Orden Ministerial sobre creación y funcionamiento de Escuelas de Música y Danza. Dicha orden desarrollaba el artículo 39.5 de la Logse “que responsabilizaba a las administraciones educativas de la regulación pedagógica y organizativa de las EMD. La pertenencia al sistema educativo, aun sin ser enseñanza obligatoria ni ofertar titulación, implica que las EMD asumen las finalidades y características generales que las leyes otorgan a dicho sistema” (Doce Notas, nº 18).
El propio Ayuntamiento de Madrid, sin ir tan lejos, aprobó el 25 de septiembre de 2009 la Ordenanza Reguladora de las Escuelas Municipales de Música y Danza en la que se especifica el marco jurídico sobre el que se apoya esta Ordenanza y en el que consta, entre otras leyes, la famosa Orden 30 de julio de 1992 de la Logse, del Ministerio de Educación y Ciencia, por la que se regulan las condiciones de creación y funcionamiento de las Escuelas de Música y Danza, de la que entresacamos algunos de los puntos que arrojan luz sobre si las escuelas son o no centros educativos.
“Las Escuelas Municipales de Música y Danza otorgan la oportunidad a todas las personas, a partir de cuatro años y sin límite de edad, de acceder a una enseñanza artística de calidad, no profesional, y cuyo principal objetivo es la formación de aficionados y el disfrute de la música y la danza en cualquiera de sus manifestaciones.”
“Todo esto se enmarca en el derecho de todas las personas a la educación, promoviendo también, la participación en la vida cultural y artística de la ciudad.”
“Las Escuelas Municipales de Música y Danza no sólo fomentan desde la infancia el conocimiento y apreciación de la música y la danza sino que también orientan a las enseñanzas profesionales a aquellos alumnos con las aptitudes necesarias para ello.”
“El incremento paulatino de Escuelas en el Municipio con el consiguiente aumento del número de alumnos y profesores, la atención a colectivos con necesidades educativas especiales, la proyección de las agrupaciones de las escuelas e intercentros al exterior, aconsejan la aprobación de una Ordenanza como instrumento básico para la organización y funcionamiento de las Escuelas.”
“Las Escuelas Municipales de Música y Danza son centros de enseñanza de régimen especial cuya finalidad es ofrecer una formación práctica dirigida a aficionados de cualquier edad y en su caso orientar a estudios profesionales.”
Algunos enlaces de interés
Tarifas 2012-2013 de las Escuelas Municipales de Música de Madrid, hechas públicas el 19 de septiembre 2012.
7 años de Escuelas de Música en España (Doce Notas nº 18, oct-nov. 1999. Dosier)
Guía de las Escuelas Municipales de Música y Danza, publicada por la Federación Española de Municipios y Provincias en 2010
Asociación de Escuelas Municipales de Música y Danza de Madrid
Unión de Escuelas de Música y Danza
Orden 30 de julio de 1992 de la Logse
Ordenanza Reguladora de las Escuelas Municipales de Música y Danza del Ayuntamiento de Madrid