Según explicó Colomer, se combinarán obras indispensables del repertorio con propuestas para descubrir o ampliar el conocimiento de otros compositores, con obras mucho menos programadas, como Casella, Orbón, Martin o Dutilleux. Todo ello dentro de un arco temporal y estético igualmente extenso.
Para complementar la nueva programación de la OFM habrá también conciertos en pequeño formato que se ofrecerán en la segunda edición del ciclo Los clásicos nunca duermen, que tendrán lugar en la Sala María Cristina, que incluirá obras de Mozart, Haydn, Schubert y Strauss.
La Música de Cámara se consolida en el auditorio del Museo Picasso, prosigue el Ciclo de Música Contemporánea, dedicado a la mujer compositora y el abanico de propuestas se extiende a los conciertos populares, familiares y didácticos.
Una oferta que el propio Edmon Colomer invita a conocer y a saborear, “un poquito de cada sabor, una tapita”, en el concierto inaugural de la temporada previsto para el día 8 de septiembre en el Cervantes.