Acabamos de conocer que el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid ha decidido no empezar las clases porque, aunque tiene que implantarse el nuevo plan de estudios, coexistiendo con el plan LOGSE, se ha reducido la plantilla docente y las horas del profesorado. La semana próxima se ha convocado un claustro extraordinario para analizar la situación y tomar las oportunas decisiones. Se queja la Junta de Departamentos, además, de que el tratamiento que se está dando no contempla la autonomía que requiere la educación superior, incluso contra lo ya acordado en el ámbito parlamentario.
En la Comunidad Valenciana, la Asociación de Catedráticos denuncia que la situación laboral creada por el abuso de la concesión de comisiones de servicio, sin ningún criterio de valoración docente de la aptitud del profesorado, es insostenible y está perjudicando severamente el funcionamiento de los centros, extendiéndose la queja también a la falta de la autonomía necesaria para estos centros y a las vulneraciones de la LOE que contienen los Estatutos del ISEACV, recurridos en vía contencioso-administrativa por dicha Asociación.
También los alumnos valencianos manifiestan que no pueden matricularse de todas las asignaturas que necesitan para terminar sus estudios, porque no se ofrecen las asignaturas optativas correspondientes al plan de estudios LOGSE. Se quejan también de que para cursar el Máster en Formación del Profesorado, que necesitarán para impartir la docencia en el grado profesional de música, se les exige un nivel de Inglés que no necesariamente tienen. Extraño requisito, pues el Inglés no es lengua oficial de la Comunidad Valenciana, que les impone una exigencia de la que no fueron prevenidos en su momento.
Los alumnos andaluces que han ido a matricularse del plan nuevo se encuentran con que se han de matricular obligatoriamente de las asignaturas «Lenguaje Musical» y «Teoría de la Música», una interpretación retorcida de la materia «Lenguajes y Técnicas de la Música», calculadamente ambigua en sus descriptores, que fue duramente criticada por profesores y catedráticos de toda solvencia, y que el Ministerio de Educación, pese a ello, se empecinó en mantener en el Real Decreto de contenidos básicos, atendiendo a oscuros intereses que no han sido desvelados.
Estos ejemplos de actualidad son suficientes para dejar bien claro que la situación se asemeja a un polvorín a punto de estallar, a lo que hay que añadir esperanzadoras notas de tinte positivo, que contrastan con esta caótica situación: la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid, un centro privado, ofrecerá este curso estudios superiores oficiales de Música, en las diversas modalidades de la especialidad de Interpretación, para lo que contará con profesores «de primera». Aunque algunas voces han dicho que esto es ilegal, no cabe tal afirmación, pues la normativa vigente permite a los centros privados ofrecer estos estudios superiores y, además, esta Universidad está en proceso de autorización administrativa por la Comunidad de Madrid.
Coordinadora de enseñanzas artísticas superiores-CEEAASS
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