Los estudiantes de este máster, que se cursa en modalidad a distancia, estaban conectados mediante videoconferencia, desde cualquier lugar del mundo, con la sala de grabación en la que la Orquesta Filarmonía interpretaba sus proyectos en Madrid.
La aplicación de las nuevas tecnologías permitía a los alumnos del máster dar indicaciones e intercambiar impresiones en tiempo real con Pascual Osa, el director de la Orquesta Filarmonía, para lograr que sus composiciones suenen tal y como ellos las han imaginado.
Se trata de una experiencia que permite a los jóvenes compositores estar en contacto con una orquesta sinfónica profesional, puesta a disposición del talento de estos alumnos, que son preparados para crear música a un nivel profesional.
Para la Orquesta Filarmonía es un verdadero privilegio poder participar en este máster junto a una entidad como la UNIR, porque nos permite apoyar a estos creadores, que son el futuro de la música y que cuentan con unas capacidades sobresalientes, explica Pascual Osa.
En el momento de grabar cada proyecto, la orquesta y su conductor, Pascual Osa, disponían de la partitura en sus ‘tablets’. El alumno estaba conectado por medio de videoconferencia para poder ver y escuchar la interpretación de los músicos, pudiendo hacer las modificaciones o sugerencias que considerase oportunas.
Sus cambios, anotaciones o indicaciones quedaban reflejados automáticamente en la partitura de los músicos, logrando una inmediatez y una interacción absolutas en el proceso de grabación de una sinfonía.
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