Con técnicas tan variadas como los títeres de guante, de hilo o de varilla, el teatro de objetos y la interpretación actoral, la programación del festival aborda diferentes tipos de público y presenta dos líneas de actividad: un ciclo dirigido a público infantil y familiar que tendrán su cita todos los sábados y los domingos del festival a las 19 horas y a las 21 horas, y otro ciclo orientado a público adulto y adolescente que podrá disfrutar del universo del títere todos los viernes de agosto a las 21 horas.
Verano de títeres para grandes y peques
El festival, que dio comienzo el pasado fin de semana, presenta los días 7 y 8 de julio dos obras de la compañía Títeres sin Cabeza: Kikiriguau, recomendada para niños y niñas a partir de 12 meses de edad, y Tuga hace el payaso, para peques a partir de 3 años. Dos obras en las que la amistad y la confianza en los demás y en uno mismo se presentan como referentes para crecer y explorar nuevos caminos.
La confianza para vencer el miedo y para perseverar en los propios sueños son temas comunes a muchas de las obras programadas para público infantil dentro del festival, que en su mayoría están recomendadas para niños y niñas a partir de 2, 3 y 4 años en adelante. El componente educativo que con frecuencia caracteriza este tipo de producciones se presenta renovado, lleno de humor y ternura, garantizando el disfrute de toda la familia.
Dentro de la programación para público adulto y adolescente, que el festival presenta como novedad este año, destacan las cinco obras que el público madrileño podrá disfrutar los viernes de agosto a las 21 horas y que abordan temas tan dispares como la vida y obra de Federico García Lorca en Dejadme las alas, la enigmática vida de una mujer que ha vivido muchas vidas en Me llaman perla preciosa y el fascinante viaje en el tiempo al encuentro de Thomas Edison en (R)Evolución. El fin del mañana.
También en la programación para adultos, las obras Hambre come y Antonino!, de la compañía Manzanas traigo y Juliana Notari, presentan su delicado trabajo en miniatura con pequeñas escenografías y animación de personajes con distintas técnicas de manipulación de títeres y objetos, para ser visto casi en exclusividad, muy de cerca y por turnos. Y la obra Simplemente Clara, de la compañía Minusmal, que ofrecerá el retrato de una criatura sencilla y tierna y de su estrecha relación con el titiritero que la anima. Todo un derroche de imaginación creadora que contradice la idea de que los títeres son solo para niños y niñas.
Toda la programación del Festival de Verano y del Teatro de Títeres de El Retiro se puede consultar en
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