
Detalle del cartel de la exposición Narciso Yepes
A la inauguración asistirán Marysia Szumakowska de Yepes, su viuda, y su hijo Ignacio Yepes que han participado activamente en el concepto de la exposición y en la selección de los elementos que la componen. El periodista Carlos García-Hirschfeld será el encargado de hacer la presentación de tres vídeos que ha realizado sobre Yepes y que se proyectarán en varias pantallas durante los seis meses que durará la exposición.
Narciso Yepes nació en Lorca en 1927 y falleció en la ciudad de Murcia en 1997. Su labor como intérprete, investigador del repertorio medieval, renacentista y barroco, y su gran papel como impulsor y defensor de la música contemporánea le hicieron internacionalmente reconocido. Numerosos compositores le dedicaron sus obras, a veces fruto de una colaboración activa entre el compositor y el intérprete. Prueba de todo ello es la magnitud de su producción discográfica, probablemente una de las más extensas y variadas que podamos encontrar en cualquier disciplina musical. En total grabó casi 150 discos con las mejores casas discográficas como Zafiro, Decca o Deutsche Grammophon.
Su popularidad fue enorme, cosa poco común en un guitarrista clásico; a ello contribuyeron admirablemente su versión del Romance Anónimo, conocido como Juegos prohibidos –por haber sido banda sonora de la película Jeux Interdits, del director René Clément (1952)– y sus numerosos conciertos y grabaciones del Concierto de Aranjuez del Maestro Rodrigo.
Hombre inquieto, perfeccionista e innovador, Narciso Yepes sintió la necesidad de ampliar las posibilidades de su instrumento, la guitarra española, desarrollando con varios constructores famosos, como Ramírez, Fleta o Bernabé, su guitarra de diez cuerdas que comienza a utilizar a partir de 1964. Además de obtener mayor resonancia le facilitaba el tocar piezas de música barroca –tan importante en su repertorio– que originalmente habían sido escritas para laúd. La guitarra de diez cuerdas de Yepes fue adoptada por numerosísimos guitarristas de todo el mundo y debe sin duda ser considerada como una de las grandes aportaciones a la lutería del siglo XX.
Como bien señala el comisario de la muestra, el también intérprete, investigador y lutier, Carlos González, “la guitarra española es un instrumento poderoso y bien anclado en nuestra memoria colectiva, su personalidad y su voz, junto a sus inconfundibles características sonoras y técnicas, hacen que muchos intérpretes tiendan a adaptar la música no escrita para guitarra a su instrumento. En este proceso la música pierde a veces su esencia, su voz propia, ‘traducida’ en cierto modo a otro idioma. Narciso Yepes se propuso lo contrario, forzando a su guitarra a hablar el idioma original de la música que interpretaba, fuese para piano, para laúd o para otros instrumentos. Esa difícil meta la que le llevó a concebir su guitarra de diez cuerdas que ampliaba los límites naturales del instrumento”.
Objetos personales en la exposición
La exposición reúne 14 instrumentos, entre los que se incluyen guitarras históricas, como una Joséf Pagés de 1812, una Antonio de Lorca de 1849 y una Antonio de Torres de 1864. El resto son guitarras que tocó Narciso Yepes a lo largo de su vida, tanto de seis cuerdas, de doce, e incluso una guitarra única de 14 cuerdas que le hizo el luthier holandés Nico van der Waals en 1972. Del mismo constructor se podrá ver el laúd con el que Yepes grabó su integral de música para laúd de J.S. Bach.
A todo ello se suma una amplia selección de guitarras de 10 cuerdas, de Ramírez, Bernabé, Fleta y Yamaha, pero también se exponen dos de sus guitarras de seis cuerdas que más utilizó al inicio de su carrera, una Marcelo Barbero de 1949 y una Ramírez de 1960.
La exposición cuenta también con una recreación de su estudio de trabajo, con su asiento, atril, apoya pié -que él llamaba su perrito- y con «la cama» un mueble bajo alargado donde dejaba siempre la guitarra que iba a tocar. También expondremos objetos personales, como su reloj, su magnífico metrónomo de bolsillo Cadencia Parker, sus gafas, sus lupas, sus lápices y rotuladores, etc. Partituras impresas y manuscritas, libros y revistas, medallas y condecoraciones, discos, etc completan la exposición que he concebido en colaboración estrecha con la familia Yepes.
Hasta hoy no se había presentado al público una exposición tan amplia dedicada a su vida y obra. Pero el que sea el Museo de la Guitarra Antonio de Torres de Almería el encargado de ello, hace de esta muestra el mayor homenaje que podía rendirse a la memoria de Yepes. El museo debe su nombre, como muchos sabrán, al lutier almeriense del siglo XIX considerado el padre de la guitarra clásica.
Afortunadamente su memoria sigue viva y los estudios y homenajes dedicados al gran guitarrista lorquino siguen floreciendo. En 2013, por ejemplo, el Festival de la Guitarra de Córdoba le dedicó unas jornadas de estudio que ha dado lugar a una excelente publicación.
Museo de la Guitarra Antonio de Torres
Del 14 de noviembre 2015 al 3 de mayo 2016
Pasaje del Beato Diego Ventaja s/s Almería
Tel: 950274358