Mondomusica-New York 2013. www.mondomusicanewyork.com
Los luthieres insistían –y siguen insistiendo– en que el salón se debe celebrar en su propia ciudad, mientras que los organizadores apostaron por internacionalizarlo y exportarlo a Estados Unidos, concretamente a Nueva york. (Ver Mondomusica Cremona 2012: Luhería y política en un diálogo de sordos).
Como si no tuvieran suficiente, acaba de conocerse la noticia de que los organizadores, ignorando una vez más las opiniones de los expositores, no solamente repiten en Nueva york (10-12 abril) sino que harán presentaciones muy selectivas en otras dos importantes ciudades americanas: Chicago (4 de febrero) y Los Ángeles (6 de febrero).
Tras un estudio de mercado han llegado a la conclusión de que son importantes focos potenciales de músicos y coleccionistas por lo que quieren captar su atención… y su dinero.
El colectivo de luthieres esgrime el argumento de que los principales músicos y coleccionistas ya se desplazaban a Cremona durante Mondomusica, además de que la mayoría de ellos ya se habían buscado representantes y dealers de confianza en los que depositar sus instrumentos en Estados Unidos. Insisten en que el esfuerzo no vale la pena y que los resultados no compensan.
Probablemente las presiones económicas por parte de los organizadores americanos sean suficientemente atractivas para los organizadores de Mondomusica como para repetir una año más, a pesar de las reticencias expuestas por los luthieres: los costes organizativos son altísimos y la afluencia de público en Nueva York muy escasa en relación a las expectativas generadas.
Acudir a Mondomusica de Nueva york significa un esfuerzo gigantesco de trasladar instrumentos, stands, accesorios… Este traslado por cuestiones logísticas se realiza de forma global en un solo gran envío desde Europa, concentrando el material tanto de luthieres como de mayoristas. Parece ser que en el año pasado hubo un grave error de coordinación y se mandó todo el material a la costa oeste, mientras los expositores inauguraban con los stands vacíos a la espera de que se redirigiera todo hasta Nueva York, por lo que la inauguración generó una gran sensación de perplejidad y desánimo.
La organización quiere ser cada vez mayor y crecer en importancia y por otro lado los expositores están muy descontentos por la falta de interés que reciben cuando van a exponer a Cremona, quejándose de que el interés se pone solamente en Estados Unidos mientras que en Cremona también baja la afluencia de público.
Según los luthieres esta situación genera demasiada confusión y quizá este año empiecen a tener algunas ausencias significativas…